sábado, 23 de abril de 2022

BERNARDO BUSTILLO ANDARA MI PADRE

 BERNARDO BUSTILLO ANDARA MI PADRE

El 12 de Marzo de 1937 nació en el municipio de El Rosario Departamento de Comayagua.

Siendo el primogénito de Don Manuel de Jesús Bustillo Pereira y Bernarda Andara Hernández. Matrimonio de escasos recursos que residían en la aldea de Guasistagua. Un bello paraje escondido entre las montañas de Comayagua, ya que para el año del nacimiento de mi padre, solamente se podía llegar al lugar montado en una bestia, machete en mano y con la disposición de mojarte las piernas para cruzar un par de ríos caudalosos.

Mi abuelo Don Manuel era telegrafista jubilado. "Cuenta mi papi que mi abuelo (su papá) trabajó como telegrafista de Casa Presidencial desde principios de 1925 cuando estaba finalizando su gobierno provisional el Presidente Vicente Tosta; continuó con la misma labor durante el gobierno de Miguel Paz Barahona (Febrero 1925-Febrero 1929), siguió en el gobierno de Vicente Mejía Colindres (Febrero 1929-Febrero 1933) y finalizó cuando inició la presidencia Tiburcio Carías Andino (Febrero 1933)". (Tomado de Historias de mi papi escritas por César Bustillo)

Este trabajo le permitió conocer mucha gente importante que a la postre ayudarían a mi abuelo con su hijo Bernardo, mi padre. Mientras mi abuela colaboraba con la economía familiar vendiendo cigarrillos fabricados por ella en una caparazón de tortuga. Eran muy pobres, pero modelo de honradez, rectitud y de lucha por obtener una vida mejor.

Eran tan pobres que mi padre nunca tuvo un par de zapatos mientras vivió en Guasistagua creció comprendiendo que para superarse tenía que salir de tan bello paraje. Ya que en la aldea solo había hasta segundo grado de escuela. De 7 y 10 años cursó esos 2 grados, y sus estudios se detuvieron porque para continuar debía trasladarse a la capital Tegucigalpa.

Desde muy niño colaboraba con sus padres.
"Cuando la señora que horneaba en el pueblo, hacía pan, mi papi de unos 8 años, llegaba a ver; llevaba en sus manos 6 ctvs ( Lps. 0.06) que le había dado mi abuelita para que comprara un bollito... mientras miraba, pensaba: "cuando sea grande me voy a comprar un Lempira (L. 1.00 igual a U.S. $ 0.04 hoy en día) de pan para mí solito". Nunca llegó a comprarle esa cantidad de pan porque tiempo después se tuvo que ir de su pueblo para estudiar a la capital Tegucigalpa donde dice que comió mucho pan y fue feliz". (Tomado de las Historias de mi papi escritas por César Bustillo)

"No habiendo medio de transporte, ni medios económicos para pagar un pasaje, le tocaba ir a pie hasta Comayagua, la cabecera departamental desde su pueblo a realizar diligencias de mis abuelos... son más de 20 kms. Salían de madrugada, su reloj eran los cantos de gallo... se tardaba entre 5 y 6 hrs. y otra cantidad igual al regreso, llegando a su amado pueblo cerca de medianoche. Tenía alrededor de 15 años y sus sueños eran su inspiración". (Tomado de las Historias de mi papi escritas por César Bustillo)

Cada año esperaba que ese fuera el año de poder irse a la capital a continuar sus estudios. Así vió pasar 7 años hasta que llegó tan ansiado momento. El año era 1954, mi papá recuerda que no había ni una carretera pavimentada en todo el país por esos tiempos.

1954 llega a Tegucigalpa a continuar su escuela, llevaba 7 años sin estudiar en su pueblo Guacistagua. Iba a tercer grado y tenía 17 años. Cuando su pariente lo fue a matricular, quería hacerse pequeño para que lo aceptarán. Al final lo aceptaron bajo amenaza de que si era conflictivo iba a ser expulsado.

"Era un sábado de Abril... feliz por reiniciar sus estudios. Su primer tarea: aprenderse cuales eran las Islas de la Bahía; me explica que luego de tanto tiempo sin haber estado estudiando, le costó un mundo aprenderse el nombre de cada isla. Llegó a Tegucigalpa con muchos sueños llevando únicamente 3 mudadas que le había acomodado mi abuela envueltas en una toalla que era su maleta". (Tomado de las Historias de mi papi escritas por César Bustillo)

Sus compañeritos de escuela lo apodaron KING KONG por ser grande.  Gracias a él nadie se metía con los niños de tercer grado. Lo admiraban en tercer grado.

17 años y en tercer grado. Claro que le daba pena, tan grande y  en tercer grado. Pero  su felicidad por estar estudiando superaba la pena. Lastimosamente mis abuelos en extrema pobreza solo lo pudieron mantener un año en Tegucigalpa. Mi abuelo le escribió una carta explicándole que ya no podría mantenerlo el siguiente año y que se regresará a Guasistagua.

Al enterarse por carta de mi abuelo que no le seguirían sosteniéndole en 1955, tomó la decisión de no volver y empezar a valerse por sí mismo.

Tuvo que salirse de la casa de sus parientes, pues ya no contaba con el apoyo de su papá, pues era quién le pagaba a sus parientes para que lo tuvieran en su casa. Algo tenía claro mi papá: Que Guasistagua estaba en el pasado, el futuro era en la ciudad. Sin sospechar él que muy pronto conocería al amor de su vida.

Fue Así que muchas veces no tuvo techo dónde dormir ni comida que comer. Muchas veces dormía en el parque de béisbol en Lempira Reina o en cualquier parque de la ciudad.

Él decidió quedarse en Tegucigalpa. No volvería a Guasistagua para vivir, pero si de visita. Por lo que tuvo diversos trabajos como canillita, vendiendo revistas, como conserje, ayudante de albañil, etc.

Muchas veces se llegaba la hora de la comida y él sin dinero y sin saber que comería. Muchas veces ayunaba a la fuerza, pero siempre de alguna u otra forma  Dios le proveía alimento.

Como en cierta ocación que: "Caminando por las calles de Tegucigalpa sin saber que almorzar y sin dinero, vió una fila de personas... y preguntó ¿para qué hacen fila?, le contestaron que regalaban el desperdicio de cono (era una heladería)... él decidió hacer fila y recibió su copa de desperdicio de conos... ese fue su almuerzo ese día, ¿su bebida?... un poco de agua de la llave".
(Tomado de las Historias de mi papi escritas por César Bustillo)

Así sobrevivía un día a la vez. Se sentía solo sin el apoyo de mi abuelo. Pero eso, él sin saberlo, estaba a punto de cambiar. Ya nunca más estaría solo.

En 1958 conoce a Miguel Cañas y se hacen buenos amigos. Fue así que con la ayuda de Miguel Cañas, quién vivía en Tegucigalpa desde la edad de 10 años y quien trabajaba en la barbería El Fígaro que en 1958 le enseñó a trabajar a mi papá en la barbería.
0 compartían los gastos del apartamento y para que pudiera pagar su parte de la renta, le enseñó a cortar pelo, oficio al que él se dedicaba.

Miguel le consiguió trabajo en una barbería diferente a la que él estaba para no hacerse competencia entre ellos 2. Pero en la otra barbería no le iba muy bien a mi papá. Pues nadie quería cortarse el pelo con el nuevo porque no sabían los clientes si lo podía hacer bien.

Fue así qué Miguel Cañas al enterarse que a mi papá no estaba cortando pelo, pues todavía tenía temor de hacerlo mal, que lo llevó a su barbería que quedaba en frente de un colegio y puso un rótulo en el colegio de qué se iba a cortar gratis el pelo en la barbería a los estudiantes del colegio.

Se armaron unas colas enormes para que le cortaran el pelo gratis. Lo que no sabían los alumnos era que el pelo se los iba a cortar un Barbero inexperto. Fue así que mi papá adquirió la experiencia debida. Esa semana le cortó el pelo a más de 100 niños.

Sí así que se quedó en la misma barbería de Miguel donde su principal clientela era un alumnos del colegio. Así empezó a generar ingresos para poder seguir manteniéndose en la ciudad y poder seguir el anhelo de estudiar.

Eran buenos amigos. Compartían los gastos del departamento. Pero estaban próximos a conocer un tercer amigo con el cual compartirían los gastos entre 3.

Por ese mismo tiempo, mí tío Félix se escapó del dominio de mi abuela Evangelina descalzo y con una sola mudada de ropa, y de jabón en jalón y otros tramos caminando llega a Tegucigalpa a cumplir su gran anhelo estudiar. Según mi prima Belinda hija de mi tío Félix.

Con tan buen tino que conoce a Miguel y Bernardo y le dan posada. Por cierto Miguel Cañas tenía 2 hijos ya: Miguel y Nahum.

Para 1960 mi abuela Evangelina se entera que su hijo Félix está en Tegucigalpa. Y agarró a la familia y se mudó a Tegucigalpa, junto con ella iban mi mamá Hortencia y mi tía Eleonora que se casarian con mi papi y Miguel respectivamente.

Al llegar mi abuela Evangelina a Tegucigalpa ubica a mi Tío Felix en el barrio Las crucitas de Comayagüela y enviaron a mi mamá a buscarlo.

"Mi mami llega a preguntar por mi tío Félix (su hermano), mi papi abre la puerta y le dice que no está pero que pasara adelante... ella al ver que no está su hermano, no acepta y se va. En ese momento se conocieron mis padres, en el barrio Las Crucitas en Comayagüela. Mi papi quedó impactado "me cae bien esa trigueña". Corría el año 1960. Él tenía 23 años y ella 17". (Tomado de las Historias de mi papi escritas por César Bustillo)


Inmediatamente mi papá puso los ojos en mi mamá Hortencia y Miguel en mi tía Eleonora. Visitaban continuamente la casa de ellas pues le pidieron a mi abuela qué les vendieran los tres tiempos de comida, que ellos se lo pagaría y mi abuela vio el medio de agenciarse de ingresos. Fue así que empezaron los cruces de miradas y coqueteos. Miguel fué más allá le pidió a mi abuela qué cuidara de Miguel y Nahúm sus hijos.

Otro dinerito más de ingreso. Mi abuela asignó a mi tía Eleonora para que cuidara de los niños,   y el trato que le daba los niños terminó enamorando Miguel.

Fue así que el destino uno en Tegucigalpa a 3 aventureros, para luego ser amigos y terminar siendo familia:
Félix Alberty López
Miguel Cañas y
Bernardo Bustillo Andara.

Pero mi papá nunca perdió de vista su objetivo principal: estudiar. Con el paso de los años veía como ese sueño se iba cumpliendo.

Así realizó sus estudios:
1955 Cuarto grado
1956 Quinto grado
1957 Sexto grado
1958 primer curso de ciclo común
1959 segundo curso de ciclo común
1960 tercer curso de ciclo común
1961 primer curso de comercio
1962 segundo curso de comercio
1963 tercer curso de comercio
De esta manera logró graduarse de perito mercantil y contador público del cual nunca pudo conseguir trabajo por lo que se fue quedando como barbero.

Todo marchaba muy bien Hasta que mi abuela Evangelina decidió regresarse a El Progreso. A mediados de 1963. Separando los enamorados.

Mi abuela Evangelina decidí regresar al Porvenir de Norte en El Progreso y Cómo se había encariñado de Miguel y Nahúm se los llevó con ella a El Progreso.

Miguel llegó a la casa de mi abuela para casarse con mi tía Eleonora, casándose con ella el 8 de Junio de 1963. Inmediatamente Miguel migra a los Estados Unidos dejando embarazada a mi tía Eleonora de su ptimer hijo, Elvis. Después del nacimiento de Elvis; Miguel regresa por mi tía y migran a los Estados Unidos a trabajar dejando con mi abuela Evangelina a Miguel Nahúm y Elvis. Luego nace Emilio, esta vez en los Estados Unidos, pero como el cuido de niños era muy caro en los Estados Unidos mi tía viajaba Honduras y regresaba los Estados Unidos para no perder la residencia. En en uno de esos viajes vino a dejar Emilio con mi abuela.

Mientras Eleonora se casaba mi mamá Hortencia veía que su hombre no había tomado la misma decisión que Miguel.

Fue hasta el siguiente año 1964 que un día inesperado Bernardo Bustillo Andara llegara a El Porvenir del Norte por ella.

"Luego de finalizar sus estudios en Tegucigalpa se viene a San Pedro Sula en 1964, con una carta de mi abuelo dirigida al Periodista Pedro Escoto López para que le diera posada mientras lograba obtener donde vivir. Estuvo en la casa del periodista durante una semana... pasó a vivir en un apartamento en Barandillas compartido con un conocido. El alquiler era de L. 20 mensuales, cada uno pagaba L. 10". (Tomado de las Historias de mi papi, escritas por César Bustillo)

Buscó trabajo como perito mercantil sin éxito. Así que llegó buscando trabajo a la Barbería Cosmopolita y platicó con Don Abraham Alegría el dueño de Barbería.

El motivo de mudarse a San Pedro Sula para estar más cerca de mi mamá que se había venido de Tegucigalpa a Él Progreso. Logrando casarse con ella en agosto de 1965. Procrearon 3 hijos de los cuales soy el segundo.

"Luego que mi mami y mi papi se casaron en 1965, alquilaron un apartamento cuya dueña era doña "Prisca" Paguada, estaba ubicado interiormente en la propiedad, ubicada en la 7 avenida y 4-5 calle S.O. del barrio El Benque; pagaban L. 27.50 ( U.S. $ 1.10 al cambio actual) al mes incluyendo el agua y la energía eléctrica. Me cuenta que el almuerzo para ambos se lo compraban a doña "Prisca" a L. 0.60 ( U.S. $ 0.02 al cambio actual) cada uno. En ese apartamento vivieron hasta 1969, luego de que naciera el último de mis hermanos Héctor Manuel".

"Pasó muchísimos años trabajando en la barbería Cosmopolita que se ubicaba en la 4 avenida entre 4 y 5 calle S.O. a veces pasaba toda una mañana sin ningún cliente, si no cortaba pelo, no había dinero. Estableció vínculos fuertes con sus clientes. Lo víen varias ocasiones cuando al pasear con él, se acercaban algunos caballeros muy contentos de volverlo a ver, recordando que cuando eran niños, él les cortaba el pelo. Se alegraban de verlo bien y saludable. Cuánto aprecio!! Se despedían con la alegría de haber saludado a alguien que quizás los trató con mucho cariño en su trabajo de barbero".
(Tomado de Historias de mi papi escritas por César Bustillo)

Trabajaba en horario de 8 a 12 y de 1:30 a 8 de la noche. Los días sábados no salí a almorzar por lo que mi mamá le llevaba almuerzo y comía cuando podía a veces terminaba almorzando a las 3 de la tarde.

Para la época de Navidad todos los días le preguntabamos Cuánta propina le habían dado los clientes y nos alegrabamos cuando había uno que le había dado 20, 30, 50 o 100 lempiras por haberle cortado el pelo por todo un año.

En 1977 empezó a padecer de un dolor en la pierna. En el IHSS un médico le diagnosticó hernia en la columna. Solución operación de la columna con riesgo de quedar inválido. Con los ojos llorosos le dijo al médico que no podía operarse pues sus hijos, entre ellos yo, estábamos muy pequeños y necesitábamos de él.

Así que decidió vivir con el dolor en la pierna el cual se acrecentaba porque su trabajo de la barbería requería que estuviera de pie. Llegaba exhausto la casa y necesitando un descanso mucho más largo de lo que la noche le proveía. Estaba luchando por nosotros sus hijos con todas sus fuerzas.

Afortunadamente un cliente le comento de un médico naturista qué reparaba columnas por medio de unos ejercicios, sin necesidad de operación. Cuando tuvo el dinero para pagar el médico fue donde y en efecto los ejercicios le ayudaron mucho. Asistió unas 3 veces porque luego aprendió el solo hacer los ejercicios.

Después de una buena temporada de hacer ejercicios nunca más volví a ver que mi papá se quejara del dolor de la pierna fue sanado completamente. Fue por esa época que empezó a hacer ejercicio, a correr por las madrugadas y a salir de paseo en largas caminatas a lugares como el rótulo de Coca Cola,  el parque infantil o el río Santana, estas últimas caminatas las hacíamos generalmente los domingos. Cuánto disfrute esa temporada de caminatas pasábamos buenos ratos con mi papá.

Los tres amigos ya habían tomado rumbos diferentes, Miguel se fue a los Estados Unidos y engendró 3 niñas más con mi tía Eleonora. Según me contó mi tía Eleonora en 1971 Se vinieron de Estados Unidos rumbo a El Salvador pasaron por Honduras llevándose a Miguel, Nahúm, Elvis y Emilio. No se quedaron en Honduras porque la guerra del fútbol estaba reciente y Miguel tuvo miedo que los hondureños tomarán represalías contra sus hijos por tener papá salvadoreño.  Por eso dejó a la familia en El Salvador sin saber que en los que en los siguientes años se iba a desatar la guerrilla y sus hijos corrieron mucho más peligro. Fue así qué Miguel se fue para Venezuela.

Mientras tanto mi tío Félix formó hogar con la joven Bertha Imelda Ferrera Suazo,juntos criaron 3 hijos: Belinda, Félix y José.

Algo que siempre admiré de mi papá es lo organizado que era. Como su trabajo en una barbería su pago dependía de su presencia si no iba a trabajar no ganaba nada. Pero siempre se las arreglaba para que en la primera semana de diciembre de todos los años fuéramos de vacaciones a Ģuasistagua cómo disfrute ese tiempo. Lástima que nos duró poco el placer porque en el año de 1973 murió mi abuela Bernarda, después de su deceso nunca volvimos a ir.

Los viajes en bestia, el cruce de ríos y al llegar al pueblo qué mi abuela Bernarda nos había hecho pan para nuestra estadía y Y aunque las camas eran de hule y no había cielo falso éramos felices ahí.

El tiempo pasó y mi abuelo Manuel nos dejó en 1975 . Mi papá Siempre tuvo cuidado de nosotros, nos llevaba de paseo caminando, nos pagó con grandes sacrificios nuestros estudios, por las noches al salir del trabajo muchas veces nos llevaba pastelitos de piña, o semitas de panadería El Centro, o pie de leche del restaurante Luky. Nunca tuve una bicicleta o una pelota de cuero pero en lo poco que teníamos éramos felices.

Llegó una promoción de la Coca Cola y por fin obtuvimos una pelota de cuero.  Teníamos una de las tantas chapas ganadora de una pelota de cuero número 5 de fútbol solo era de canjearla y sería nuestra. Pero un vecino al ver que canjeamos la pelota le ofreció a mí mamá 50 lempiras por élla y solo túvimos el gusto de tocarla. El no tener algo nunca fue impedimento para ser feliz por lo que ante la ausencia de una pelota de cuero jugábamos con tapones de botellas de salsa de tomate.

Fuimos creciendo, pasando por los salvajes ( un grupo de baile que tuvimos con mis hermanos y Emilio nuestro primo) nos graduamos de secundaria y César inició la universidad estudiando tiempo completo pero mi hermano Héctor y yo comenzamos a trabajar yo en la hulera Sula y él en Pizza Hut.

Por supuesto mi papá quiso convencerme qué me saliera de trabajar porque antes que nada quería que estudiará Pero sabía que mi trabajo ayudaría la economía de la casa y desde las 18 años deje de ser carga para mi padre.

En 1990 contraen nupcias César y Héctor y se fueron de la casa quedando Solamente yo con mis padres. Me costó tomar la decisión de casarme pues no quería dejar solo a los viejitos.

Pero en diciembre de 1994 salgo de mi casa para unirme en matrimonio con mi amada esposa Ana Lilian Ayala.

Ya Cómo adultos empezamos encargarnos entre los 3 de los asuntos económicos de ellos. Especialmente los de salud. Luego entre los tres nos propusimos a construir una barbería en la casa de habitación de mi padre para que dejara de laborar en la Barbería Cosmopolita porque ya era muy mayor y teníamos temor de que viajando diariamente a la Barbería Cosmopolita le aconteciera algo.

Compramos una silla de barbero un aire acondicionado pusimos una cortina de hierro ido ventanales y así quedó lista la Barbería Bustillo.

Ya su salida de la Barbería Cosmopolita estaba planeada, se le puso fecha. Días antes de salir de la Barbería Cosmopolita le pregunté si tenía temor de salirse de la Cosmopolita después de 41 años de laborar y sin cobrar un cinco de derechos laborales. A lo que me respondió que no sentía miedo porque se sentía apoyado por nosotros.

Fue así qué el 2005 fue tu último día en ĺa Cosmopolita e iniciaste en tú barbería. Aún recuerdo que me comentaste que tuviste 3 clientes el primer día que la abriste. Ahora le cortaba el pelo a menos personas pero como ya no lo compartía con nadie ganaba lo mismo y sin salir de casa.

La Barbería Bustillo proveyó por 10 años los medios económicos para que mis padres pudieran agenciarse dinero limpio y honesto pero mi papá seguía envejeciendo.

Luego en el corazón de César nació la idea de llevarse a los viejitos a su casa prepararles un apartamento para que vivieran aparte y ya no tuvieran que trabajar.

César lo platicó con nosotros y estuvimos de acuerdo. Ahora solo faltaba que ellos quisieran. Se lo comentamos a ellos y les pareció buena idea, pero para un futuro no muy lejano y el destino se encargó de eso porque mi papá tuvo un desmayo y mi mamá se encontró sola sin saber qué hacer y eso motivo a mi papá decidir cerrar la barbería y venderla e irse a vivir con mi hermano.

Fue así que el 15 de febrero de 2015 dejaste la Barbería Bustillo y tu barrio Medina para ir a vivir al cuidado de nosotros tres ya sin preocupaciones, sin cuentas que pagar, sin ningún tipo de obligación.

Fue bueno saber que de alguna manera te devolvimos lo que tú hiciste por nosotros. Gracias César por tu disposición de cuidar de los viejitos fue un privilegio haber sido parte de eso.

9 de febrero del 2022 saliste de la casa para no volver nunca más. Te internamos en el seguro social (IHSS) Dónde te vi por última vez luchando por tu vida el18 de febrero de 2022. Y pude decirte en tú oído muchas veces que te amaba. Tu vida llegó a su fin el 19 de febrero del 2022 a las 3:30 de la tarde qué momento más doloroso.

El 20 de febrero del 2022 enterramos tus restos en Jardines del recuerdo sabiendo que tú ya no estabas ahí.

Nunca lograste comprar una casa ó un carro, nunca emprendiste un negocio, nunca ahorraste para tu retiro. Pero a cambio nos criaste con valores y junto con mi mami formas de tres hombres de valor con enseñanzas que nunca olvidaré y con momentos que viví a tu lado que atesoraré en mi corazón.

Realmente papá lo lograste fuistes un hombre de bien y lo hiciste bien. Tus enseñanzas permanecerán conmigo y espero honrar tu memoria. Aún parece Escuchar mis oídos: trata todas las personas por igual por Humildes que sean, respete a sus mayores, respete lo que no es suyo, etc

Muchas gracias papá por haber sido para mí qué papá que fuistes.
Te amo.

BARBERO EXCLUSIVO
Hace una semana que ya no tengo Barbero exclusivo, mi barbero exclusivo siempre me cortó el pelo. Nunca tuve que explicarle como quería el corte, solo me sentaba en su silla de barbero y él hacía su trabajo bien hecho.

Al terminar siempre quedé satisfecho con el corte y nunca permitió que yo le pagara. Mi padre fue mi Barbero Exclusivo. Desde que tengo uso de memoria fue barbero de profesión. Y sí, como suponen Sólo él me cortaba el pelo.

Pero esa exclusividad se perdió hace 6 años en una gravedad de mi padre cuando yo tenía 48 años. Mi tío Juan me cortó el pelo en esa ocasión. El hermano de mi papá.

Luego en la pandemia no me cortaba el pelo desde el 15 de enero y ya era Junio. Así que mi amada decidió cortarme el pelo sin tener experiencia previa.

Pero realmente extrañaré a mí barbero exclusivo porque era el mejor y me amaba. Me cortó el pelo por última vez el 15 de enero de 2022.

Ahora tendré que explicar cómo quiero el corte, y no sé como explicarlo,  pues nunca lo he hecho. Imagino que pasaré más de algún mal rato al no quedarme el corte del pelo como lo hacía mí Barbero Exclusivo. Y tendré que pagar el servicio.

Ando buscando barbero que me corte el pelo, pero quiero que sepa, que el mejor me lo cortaba antes que él.

BERNARDO BUSTILLO ANDARA MI BARBERO EXCLUSIVO

No hay comentarios:

Publicar un comentario

LOS SALVAJES PARTE DE MI HISTORIA

  Para 1981 se mudan para Honduras mi tía Eleonora y sus hijos Elvis, Emilio, Blanca, Geraldine y Tanya que vivían en El Salvador. Primerame...