LA VEJEZ NADIE LA PUEDE EVITAR
La fuerza física pasa, se desvanece con el paso de los años. Pero en cambio la fuerza interna se recuerda, te enaltece con el paso de los años.
La fuerza de la juventud, esa vitalidad en nuestro cuerpo juvenil, con el paso de 20, 30 ó 40 años se desvanece. Llegará el día en que seremos lentos y débiles. Necesitaremos ayuda hasta para movernos. En esos momentos sólo nuestra fuerza interior nos dará los ánimos de continuar.
Así que no se te olvide cuando veas un venerable anciano lento y caminando de manera rara, que tú algún día estarás igual, o peor....
La belleza física pasa, se desvanece con el paso de los años. Pero en cambio la belleza interna se recuerda, te enaltece con el paso de los años.
La belleza en nuestro cuerpo juvenil pasa. Los rostros perfectos, las sonrisas divinas, los cuerpos esbeltos y las cabelleras abundantes pasan. Al cabo de 30, 40 ó 50 años ya no tienes esas características.
En esos años postreros nuestro atractivo será el interno. Así que asegurate de ser humilde, servicial, amable hoy que eres joven. Porque si eres un joven prepotente, orgulloso y carente de inteligencia emocional, cuándo lleguen los años de la vejez en que nesecitarás ayuda, puede que te encuentres solo. Nadie querrá estar contigo. Serás un GRINCH.
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